Los objetivos amigos nos ayudan a desarrollar un programa de implementación que oriente los quehaceres de la organización de forma amable, medible, inteligente, global, orientada y sostenible.
¿Qué son los objetivos amigos?
La palabra objetivo es utilizada en nuestro lenguaje cotidiano para saber qué nos proponemos, qué queremos lograr, hacia dónde vamos. Son declaraciones sobre nuestros deseos, nos proporciona dirección y motivación, nos ayudan a establecer prioridades que facilitan la toma de decisiones y nos proporciona una base para medir el éxito y el progreso.
Saber qué queremos y hacia dónde vamos es el primer paso para llegar.
Cada paso nos puede apartar o acercar a nuestras metas. Si comenzamos a caminar antes de saber a dónde vamos, podemos alejarnos de nuestro destino deseado.
La palabra amigo es un acrónimo que se conforma al combinar las primeras letras de las palabras amable, medible, inteligente, global, orientado y sostenible.
Para el diseño de objetivos amigos, respondemos a las preguntas
- ¿A dónde queremos llegar?
- ¿Eso que queremos es amable, medible, inteligente, global, orientado y sostenible?
¿Por qué amigos?
A – Amables
Los objetivos amables son gratificantes para el equipo y para la organización, pues no se sienten fuera de las posibilidades de quienes los persiguen.
La amabilidad nos ayuda a reducir la incertidumbre y facilita la apropiación de los objetivos específicos por parte de quienes han de buscarlos.
M – Medibles
Los resultados de los objetivos medibles se pueden monitorear tanto en el tiempo como en recursos empleados para conocer el estatus de nuestras propuestas y el éxito obtenido.
Medir nos ayuda a evaluar para saber si hemos de continuar por donde vamos o corregir el rumbo. También nos permite saber cuando hemos cumplido un propósito para celebrar.
I – Inteligentes
Cuando los objetivos son inteligentes nos ofrecen solucionen reales que capitalicen las oportunidades del entorno.
Hoy, que hablamos de múltiples inteligencias hemos de repensar lo que son e implican las soluciones reales y cómo afectan la salud financiera, emocional, física, social y ambiental de las organizaciones.
G – Globales
Tener objetivos globales es pensar en el sistema en su conjunto y asegurar que lo que hacemos y buscamos es relevante para la organización en su conjunto, para la localidad en la que está ubicada, para la comunidad que conforma y para el mundo en el que vive e incide
O – Orientados
Orientar los objetivos tiene lógica, pues cada objetivo de nivel inferior responde a los objetivos superiores que les dan sentido a la organización y cada objetivo superior tiene cómo llevarse a cabo a través de objetivos de operativos.
S – Sostenibles
Los objetivos sostenibles generen beneficios equilibrados en lo social, lo ambiental y económico, son vigentes en en el tiempo en que son planeados y sus resultados influyen en el futuro de las organizaciones.
¿Por qué los objetivos tienen distintos niveles programáticos?
Un objetivo puede ser tan amplio o tan acotado como nuestros deseos y generalmente nuestros deseos pequeños responden a un deseo mayor, por lo que para cartografiarlos y encontrar su nivel, es útil generar un diagrama que nos permita ubicar su nivel programático.
Para diseñar objetivos de nivel superior respondemos para qué queremos eso que deseamos y para diseñar un objetivos de nivel inferior nos preguntamos cómo llegamos o logramos ese objetivo superior. Es una cuestión de lógica y alineación.
- No tener objetivos superiores de largo plazo es como ir sin rumbo.
- No tener objetivos operativos de mediano y corto plazo es como ir sin sin mapa, sin vela o sin motor o sin gasolina.
Combinar y alinear objetivos de diferentes niveles es cómo ir navegando hacia dónde queremos llegar, es la combinación del destino y el viaje, del proceso y el resultado.
Tener un mapa de objetivos nos permite planear cada paso que damos para ir llegando a donde queremos llegar. Podremos leerlo y navegarlo hacia arriba para saber qué queremos lograr con cada decisión y leerlo hacia abajo para saber cómo lograrlo.
Niveles programáticos de un mapa de objetivos
Generalmente nuestros deseos pequeños responden a un deseo mayor, por lo que para cartografiarlos y encontrar su nivel, es útil generar un diagrama que nos permita ubicar el nivel programático de cada objetivo. Cuando hay objetivos desalineados, se pierde tiempo y energía.
¿Cómo se establecen los niveles programáticos al plantear los objetivos operativos de una organización?
Vale la pena tener en cuenta que los objetivos suelen tener cierto nivel de relatividad, es decir, los objetivos específicos u operativos pueden ubicarse en diferentes niveles y depender unos de otros.
Puedes llamarles a los objetivos de diversas formas, lo importante es que en un diagrama relacional, los objetivos de nivel superior responden a la pregunta para qué y los de nivel inferior nos responden cómo lograr el un objetivo superior que les alinea con una misión común.
Objetivos superiores
Cada día más, se habla del sentido de trascendencia como base del éxito de una organización, empresa o proyecto. La trascendencia es la dimensión que aporta propósito a lo que hacemos.
El objetivo superior, que a veces llamamos visión o propósito responde al para qué del para qué. Surge de la conciencia de formar parte de un sistema más amplio, de la organización alineada con una instancia superior. Desde aquí surgen los impulsos de desarrollo que aportan un propósito a la existencia de la organización, la sensación de que sus resultados contribuyen al todo en que se mueve.
Trascender supone ir más allá, sobresalir, superar los obstáculos y los límites que nos acotan, porque se relaciona con el fin último con el que nos vinculamos, con una causa que es más grande que nosotros mismos.
Objetivo general
El objetivo general acota el objetivo superior y describe lo que queremos lograr de manera más concreta. Puede llamarse también misión, que es la manifestación de la acción de la organización o la organización en acción.
Se relaciona con el objetivo superior que le da sentido y responder a los valores de la organización y al igual que el objetivo superior, no siempre un asunto medible por sí mismo, pues se trata de una acción en movimiento, aunque es posible monitorearla en función de los objetivos específicos que le son dependientes.
Diseño de objetivos operativos y específicos
El diseño de objetivos específicos nos permiten planear la ruta, delimitar cada curso de acción, definir cada paso para alcanzar los objetivos superiores y medir de manera gradual los logros para continuar o corregir el rumbo. Los objetivos específicos han de evaluarse en función de resultados concretos en un tiempo determinado y con recursos preestablecidos.
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