¿De qué se trata el financiamiento colectivo?

El financiamiento colectivo llamado también microfinanciación masiva o crowd funding en inglés, permite a individuos, empresas o proyectos obtener fondos a través de la contribución de una multitud de personas.

Sumar pequeños esfuerzos logra grandes resultados.

El financiamiento colectivo permite a individuos, emprendedores y organizaciones recaudar fondos de una audiencia más amplia, lo que puede ser especialmente útil para proyectos innovadores que podrían tener dificultades para obtener financiamiento a través de canales convencionales.

Este enfoque permite a los innovadores y emprendedores obtener financiamiento y validación temprana de sus ideas, al tiempo que involucran a una comunidad interesada en el proceso de desarrollo.

¿Qué es financiamiento colectivo?

El financiamiento colectivo es una estrategia para conseguir pequeñas aportaciones de personas cuya motivación puede ser la participación altruista en una causa, el desarrollo de un proyecto o alguna recompensa específica relacionada con el proyecto.

Como en otras modalidades de procuración de recursos, las personas invertirán en un proyecto, producto u organización porque se sienten identificadas con la idea o la causa que se propone, con la problemática que se atiende o con la oportunidad que aprovecha. Además consideran que las soluciones que plantea la organización que solicita financiamiento son adecuadas y creen que quien propone el proyecto es capaz de llevarlo a cabo y dar resultados de manera eficiente y eficaz.

Aunque la estrategia busca llegar al colectivo y no a un individuo en particular, es necesario utilizar técnicas de personalización masiva que puedan incorporar códigos y aspiraciones generalizados que marquen el camino, teniendo en cuenta percepciones y deseos colectivos que sean reconocidos por las personas como propios.

¿Cómo ha evolucionado el financiamiento colectivo?

Aunque el término crowdfunding es un concepto moderno relacionado principalmente con la recaudación de fondos a través de plataformas en línea, algunos elementos de financiamiento colectivo pueden rastrearse desde la antigüedad.

Solidaridad social y aportación colectiva

La solidaridad social y la aportación colectiva a causas comunitarias no parece ser ninguna novedad. Por ejemplo:

Proyectos agrícolas

En sociedades agrícolas antiguas, las comunidades podían reunir recursos colectivos para proyectos agrícolas, como la construcción de sistemas de riego o la siembra de cultivos que involucraba la contribución de recursos por parte de múltiples personas para un objetivo común.

Construcción de monumentos

Parece que en algunas civilizaciones antiguas, también se financiaban la construcción de monumentos y estructuras religiosas, de protección o estéticas a través de contribuciones de la comunidad que proporcionaban recursos y trabajo para llevar a cabo estos proyectos monumentales.

Momentos de necesidad

Existen múltiples evidencias de gremios, cofradías e instituciones como los bao chinos, los collegia romanos y las eranoi griegas que se centraban en brindar apoyo mutuo y asistencia financiera a los miembros de ciertos grupos en momentos de necesidad como afrontar costos médicos y funerarios. Los pueblos prehispánicos en América Latina también tenían sistemas y prácticas que involucraban contribuciones colectivas para apoyar causas sociales y comunitarias.

Boteo cara a cara

El boteo es una forma rápida y sencilla de recaudar fondos. Aunque antes no se le llamaba crowdfunding, el boteo es una estrategias de financiamiento colectivo muy antiguo que consiste recolectar donaciones de manera presencial, generalmente en lugares públicos o eventos específicos, a menudo se han utilizando recipientes, botes o alcancías donde las personas pueden depositar dinero en efectivo para contribuir a una causa específica.

Generalmente el boteo se realiza con el apoyo de voluntarios que explicar directamente a las personas la causa que les mueve, aumentando la conciencia y la posibilidad de conexión emocional.

El ejemplo de la Cruz Roja

Uno de los ejemplos más visibles y exitosos de ésta fórmula es la colecta anual de la Cruz Roja, que utiliza voluntarios para acercarse a personas de diferentes perfiles en lugares públicos.

Me gustaría poner atención en tres cuestiones de éste clásico ejemplo:

• La primera es el prestigio de la Cruz Roja, que avala y facilita la recaudación.
• La segunda es la gran cantidad de voluntarios comprometidos que comparten el sentido de logro que les permite considerarse como parte de la organización, aumentando su reconocimiento social.
• La tercera es la calcomanía que se otorga a los aportantes para reconocer su contribución y ostentar o reconocer públicamente que se ha cooperado, lo que provoca en otros el deseo de donar.

Aliados para el boteo

Una derivación del boteo que actualmente ha cobrado relevancia es la recaudación de pequeñas sumas de dinero en las cajas de tiendas y supermercados, donde a cambio de la donación, se entregan tarjetas o postales cuando el participante lo requiere.

Con esta misma lógica, algunas galerías de arte apoyan a un artista específico o un programa de fomento artístico entre sus clientes y visitantes, realizan eventos colectivos, colocan alcancías en las que los asistentes pueden realizar pequeñas aportaciones voluntarias durante su asistencia, ya sea para apoyar la continuidad de un programa o para el financiamiento de un proyecto relacionado que genera reconocimiento mutuo.

Preparación

Es muy importante preparar un pitch o discursos detonante y asegurar que las personas que participan en la recaudación lo conozcan y reconozcan su valor los asuntos relevantes de la organización y el proyecto, mapear las zonas en que se llevará a cabo la campaña y conseguir los permisos correspondientes antes de lanzarse a la calle.

Ventajas del boteo para el posicionamiento de una causa u organización

El boteo permite la participación, el reconocimiento y la solidaridad colectiva acercando la posibilidad de donar a las personas. Esta estrategia no solo se logra recaudar dinero, sino aumentar la visibilidad del proyecto u organización, posicionarse y permanecer en la mente de la comunidad en el ámbito geográfico en que se desarrolla.

Afiliaciones bancarias

Al aumentar la facilidad del uso de productos financieros, ha sido posible implementar estrategias de financiamiento colectivo a través afiliaciones bancarias.

Actualmente la facilidad que ofrecen las tarjetas de crédito para direccionar o domiciliar pagos fijos o recurrentes y la posibilidad de contar con terminales móviles, facilita que los donantes decidan si prefieren hacer una sola contribución de manera esporádica o aportaciones periódicas, esto les da un flujo de ingresos que les permite planificar sus gastos en las actividades que llevan a cabo.

Hoy existen empresas especializadas que hacen financiamiento colectivo por las organizaciones cobrando un porcentaje o una cuota fija, aunque el uso de voluntarios para la recaudación sigue siendo común y apropiado en muchos casos.

Correo directo

El correo directo es una estrategia de marketing que implica enviar material promocional, informativo o publicitario personalizado directamente a un grupo específico de destinatarios a través del correo postal o electrónico. No difiere tanto de las estrategias generales del boteo.

La efectividad del correo directo depende de la calidad de la segmentación, la personalización y relevancia del mensaje, la capacidad de incentivar a los destinatarios a tomar medidas a través de una llamada a la acción y la medición de resultados.

Formatos para el correo directo

La comunicación a través de correo puede tomar diversas formas o formatos como: cartas, folletos, catálogos, postales, cupones y otros materiales impresos.

La estrategia de correo directo en la procuración de recursos se utiliza para lograr varios objetivos, aumentar la conciencia de la causa y de la importancia de una organización o proyecto, motivar la retroalimentación y mantener a los financiadores informados.

Personalización

La estrategia de contacto con donantes y prospectos de donantes por correo directo implica aproximarse a ellos de manera personalizada y dar un cuidadoso seguimiento. Una estrategia de financiamiento colectivo por correo no se limita a la redacción y envío indiscriminado de una carta que se destina a un gran número de personas y se pierde en el infinito.

Motivar la atención

Para lograr una recaudación de recursos exitosa por correo, se requiere motivar la atención de los donantes para que lean el correo y lograr que ese correo genere en ellos un deseo de ayudar que impulse a la acción. La estrategia suele ser más efectiva y eficiente con prospectos que ya han tenido algún contacto con el proyecto que con quienes no han colaborado con la organización anteriormente.

Posicionamiento

Si bien el objetivo principal de la estrategia es recaudar fondos, también lo es estar presente en la mente y el corazón de los interlocutores, lo que implica enviar mensajes adecuados a las personas adecuadas en momentos adecuados, ofreciendo información valiosa sobre el proyecto y el contexto, así como reiterar la posibilidad de donar al proyecto en cuestión.

Puedes complementar los correos de solicitud con boletines informativos que generen compromiso y lealtad.

Correo electrónico

El correo electrónico, conocido como “email” en inglés, comenzó a ser utilizado a finales de la década de 1960 y principios de la década de 1970. Uno de los primeros sistemas de correo electrónico se desarrolló como parte del proyecto ARPANET (Advanced Research Projects Agency Network), que fue el precursor de Internet.

El correo electrónico se ha ido desarrollando y evolucionando rápidamente a lo largo de los años, y desde la década de 1980, comenzó a volverse más accesible y utilizado en una variedad de contextos. A medida que las redes de computadoras se expandieron y se convirtieron en lo que conocemos como Internet, el correo electrónico se convirtió en una herramienta de comunicación esencial en todo el mundo.

Administradores electrónicos de correo directo

Aunque aún se utiliza correo postal en algunos casos, actualmente es más común utilizar el correo electrónico, para lo cuál existen administradores o plataformas de publicación conocidas como CMS o Content Management Systems como MaliChimp, Constant Contact, Brevo o Hubspot que facilitan el proceso de seguimiento, pues permiten enviar correos masivos y permanecer en contacto con los interlocutores.

Afiliaciones bancarias

¿Te imaginas que hasta hace poco enviábamos dinero en efectivo o cheque por correo postal o enviábamos giros que requerían ir al bando y hacer trámites cada vez que queríamos depositar?

Al aumentar la facilidad del uso de productos financieros, ha sido posible implementar estrategias de financiamiento colectivo cara a cara a través afiliaciones bancarias.

Actualmente la facilidad que ofrecen las tarjetas de crédito para direccionar o domiciliar pagos fijos o recurrentes y la posibilidad de contar con terminales móviles, facilita que los donantes decidan si prefieren hacer una sola contribución de manera esporádica o aportaciones periódicas, esto les da un flujo de ingresos que les permite planificar sus gastos en las actividades que llevan a cabo.

Hoy existen empresas especializadas que hacen financiamiento colectivo por las organizaciones cobrando un porcentaje o una cuota fija, aunque el uso de voluntarios para la recaudación sigue siendo común y apropiado en muchos casos.

Plataformas virtuales para el financiamiento colectivo

Las plataformas en línea comenzaron a emerger como espacios para la recaudación de fondos desde las últimas décadas del siglo pasado y se han ido fortaleciendo en la medida en que surgen nuevas alternativas y aumenta seguridad en las transacciones electrónicas.

En los últimos años se han desarrollado distintas plataformas virtuales para facilitar los procesos de financiamiento colectivo, que permiten interactuar a personas que tienen proyectos con personas que pueden financiarlos con aportaciones pequeñas o medianas. En ellas se combinan herramientas y mecanismos de información, armado de proyectos, comunicación, administración de usuarios, promoción y cobranza en un entorno amigable y seguro.

Evolución de las plataformas

Los primeros esfuerzos de plataformas de financiamiento colectivo comenzaron a principios del siglo XXI.

• ArtistShare, fundada en 2003, es uno de los primeros ejemplos notables de crowdfunding en la era digital, enfocándose en la financiación de proyectos musicales.
• Kiva, una plataforma que permite a las personas prestar dinero a emprendedores en países en desarrollo, fue fundada en 2005 y popularizó el modelo de microfinanciamiento a través de Internet.
• La plataforma de crowdfunding de donaciones DonorsChoose se fundó en 2006, centrada en ayudar a los maestros a recaudar fondos para proyectos escolares.
• Kickstarter, una de las plataformas de crowdfunding más grandes y conocidas, se lanzó en 2009, permitiendo a los creadores buscar fondos para proyectos creativos a cambio de recompensas.
• El crowdfunding se expandió a diferentes industrias y modelos, incluyendo el crowdfunding de recompensas, el crowdfunding de préstamos y el crowdfunding de inversión. Plataformas como Indiegogo, GoFundMe y Seedrs ganaron popularidad.
• La aparición de las criptomonedas y la tecnología blockchain también dio lugar a modelos como las ICO (Ofertas Iniciales de Monedas) y STO (Ofertas de Token de Seguridad).

A medida que el financiamiento colectivo sigue evolucionando, se espera que desempeñe un papel más importante en la democratización del acceso a fondos y en la promoción de la innovación y la creatividad en una variedad de industrias. Sin embargo, tampoco difiere tanto de las viejas estrategias de boteo y de financiamiento colectivo cara a cara. Es solo un nuevo canal que requiere de los mismos principios de siempre: credibilidad, persuasión y oportunidad.

Plataformas a la medida

Todas estas plataformas tienen como esencia la conformación o fortalecimiento de una comunidad de apoyo, entendida como un conjunto de personas con un objetivo común y tienen como antecedente las estrategias de financiamiento colectivo que se llevan a cabo cara a cara, que se han renovado utilizando las redes sociales cibernéticas y la interacción en línea.

Algunas se enfocan en proyectos solidarios en los que los aportantes buscan apoyar iniciativas de forma altruista; otras se orientan a la preventa de bienes o servicios apoyando a los creadores y productores a conseguir capital de trabajo al tiempo que ofrecen mejores condiciones para los compradores que apuestan a futuro; otras más ofrecen la posibilidad de participar como socios accionistas en empresas que inician operaciones con una idea creativa y que prometen ser rentables además de interesantes.

Requerimientos para el uso de plataformas de finaciamiento colectivo

Cada plataforma ofrece y requiere diferentes elementos que van desde descripciones de la filosofía del proyecto, antecedentes, justificaciones, hasta la incisión de prototipos, corridas financieras o fórmulas de producción, que se entregan a través de textos, fotografías o videos. La plataforma más conveniente para tu proyecto depende de lo que ofrezcas y lo que busques conseguir. Tomate tiempo para revisar las distintas alternativas, revisa su imagen, sus políticas y sus resultados, compáralas con las características de tu proyecto y tus expectativas.

Sigue las indicaciones en línea y registra tu proyecto en la plataforma de tu elección asegurando que podrás cumplir con lo que ofreces.

En cada rubro o apartado que se te solicite la plataforma que utilizarás muestra la identidad y el sentido de trascendencia de tu proyecto, evoca los motivos emocionales y racionales para dar, cuida que las sensaciones que quieres provocar sean congruentes con tu propuesta de valor, enfatiza en la oportunidad para el donante o inversionista y no en la necesidad del proyecto o la organización.
Propón recompensas, incentivos o ventajas específicas para quienes se suman a tu proyecto. Pueden ir desde una calcomanía o una camiseta, descuentos por ser los primeros en aportar, características exclusivas que solo obtendrán quienes aportan por ese medio o en una fase de la campaña.

Elección de la plataforma ideal

Al elegir la plataforma que mejor se adapte a lo que buscas, asegúrate de que su imagen y su objetivo sean congruentes con los tuyos, que sus sistemas de seguridad son sólidos, que tendrás acceso a tu propia base de donantes, que contarás con un buen sistema de soporte tanto para subir tu proyecto como para gestionar tu campaña, que cuenta con diferentes vías de recaudación como tarjetas de crédito, Paypal, transferencias o pago en tiendas de conveniencia, y que la plataforma provea una buena experiencia de usuario a tus interlocutores.

Promoción y posición de tu proyecto

La competencia por recursos de financiamiento colectivo es cada vez mayor. Para que tu campaña sea un éxito, será necesario que desarrolles mecanismos de difusión y promoción a través de redes sociales que conduzca a tu público hacia la plataforma. Revisa artículo sobre redes sociales de Alexandro Dupuis y recuerda que cultivar o fidelizar a los participantes es la clave del futuro y que el futuro está cambiando a toda velocidad.

Resumen de medios para el financiamiento colectivo

El financiamiento colectivo se puede llevar a cabo a través de diferentes medios que pueden combinarse entre sí. Se puede decir que existen tres medios principales para implementar una estrategia de financiamiento colectivo:

• Presencial o cara a cara
• Por correo directo
• En línea o por internet.

Cada una de estas alternativas tiene ventajas y desventajas y en todas requerirá un esfuerzo constante y una comunicación efectiva con tus patrocinadores. Adapta tu estrategia según lo que funcione mejor para tu proyecto y tu audiencia.

Ventajas y desventajas de los medios de financiamiento colectivo

Motivos del financiamiento colectivo

Existen diferentes motivos que impulsan el financiamiento colectivo, cada uno con un enfoque particular: donaciones, recompensas, préstamos, inversiones, ofertas iniciales.

Donaciones

En este tipo de financiamiento, las personas aportan dinero sin esperar una recompensa financiera a cambio. Esto es común en campañas de caridad o proyectos sociales.

Recompensas

Aquí, los contribuyentes reciben recompensas no financieras a cambio de su apoyo financiero. Estas recompensas suelen estar relacionadas con el proyecto que se está financiando. Por ejemplo, si alguien está financiando la creación de un videojuego, podría recibir una copia del juego una vez que esté terminado.

Préstamos

En esta modalidad, los fondos se prestan al proyecto o negocio, y se espera que se devuelvan con intereses en un plazo determinado.

Inversiones

Algunas plataformas permiten a los inversores adquirir participaciones en el proyecto o negocio a cambio de su inversión. Si el proyecto tiene éxito, los inversores pueden recibir rendimientos sobre su inversión y compartir en los beneficios y el crecimiento futuro.

Oferta inicial

Este tipo de financiamiento colectivo se utiliza principalmente en proyectos relacionados con el lanzamiento de nuevos productos o propuestas, incluyendo criptomonedas y blockchain que se ofrecen a los inversores que buscan soluciones innovadoras y están dispuestos a probar.

¿Cómo preparar una estrategia de financiamiento colectivo efectiva?

Crear una exitosa campaña de financiamiento colectivo implica una planificación cuidadosa y la ejecución de estrategias efectivas. Aquí tienes algunos pasos clave a seguir para llevar a cabo una campaña exitosa de crowdfunding:

1. Define tu proyecto

Describe claramente tu proyecto, su propósito y cómo se diferencia de otros. Establece objetivos específicos en términos de financiamiento y lo que planeas lograr con los fondos recaudados.

2. Establece el capital que necesitas recaudar

Subestimar el capital necesario para un proyecto puede resultar desastroso para una organización. Una vez que se recibe el dinero de un inversionista, quien solicitó el financiamiento está legal y moralmente en la obligación de proporcionar cualquier incentivo que le haya prometido a cambio. Si no logra cumplir, el desprestigio y los posibles litigios resultantes suelen ser consecuencias de alto riesgo.

3. Planificar la estrategia de recompensas

Diseña recompensas atractivas para los patrocinadores que reflejen la inversión que están haciendo.
Asegúrate de que las recompensas sean realistas y factibles de entregar. Asegura de que has identificado un compromiso mínimo viable.

No olvides tener en cuenta los compromisos legales y fiscales que adquieras al recibir aportaciones, donativos o inversiones para tu proyecto.

La mayoría de las plataformas de financiamiento colectivo permiten ofrecer recompensas o incentivos colectivos que por una parte, motivan a los participantes a invitar a otros inversionistas para obtener eso que solo juntos podrán financiar.

Ejemplo de recompensas

Por ejemplo, puedes solicitar recursos para imprimir un libro y ofrecer recompensas de la siguiente manera:

• Compromiso mínimo: Impresión de 100 libros blanco y negro con pasta blanda
• Inversión total: 5,000
• Aportación Recompensa
• A $50 Postal
• B $100 Libro
• C $2000 Libro personalizado

Si logramos entre todos $10,000 todos los libros se ilustrarán a color.

4. Crea contenido convincente

Escribe una descripción detallada y convincente de tu proyecto, destacando su propósito, los desafíos que enfrentas y cómo los fondos ayudarán a superar esos desafíos.

Prepara tu pitch como si fueras a desarrollar una estrategia cara a cara. Dile al mundo en cada interlocutor cuál es tu idea, que piensas resolver, cuál es tu visión de futuro, cuales han sido tus retos, que has encontrado en tu camino, como has superado las dificultades y presume los logros que evidencian que el proyecto funcionará, cuéntale como su aportación hará la diferencia.

Las estrategias de crowd funding suelen requerir un pitch discurso detonante concreto y efectivo, pues se trata de conseguir el mayor número de donaciones pequeñas en el menor tiempo posible para que el esfuerzo sea rentable.

Crea un video introductorio convincente que explique tu proyecto, muestre su potencial y conecte emocionalmente con los espectadores.

Una vez se cuenta con el pitch general, los recaudadores habrán de hacerlo suyo, practicándolo en forma conjunta e individual, manteniendo el formato e imprimiendo su propia energía, pasión y compromiso para lograr establecer un vínculo instantáneo que persuada y de confianza al aportante.

5. Define los medios que utilizarás para implementar tu estrategia de financiamiento colectivo

Elige el medio que utilizarás analizando cuál es el que mejor se adapte a tu tipo de proyecto y público objetivo al que quieres llegar. Compara tarifas, términos y características ofrecidas por cada alternativa

En caso de realizar campañas presenciales en áreas públicas no olvides conseguir los permisos correspondientes antes de lanzarse a la calle.

6.Prepara una estrategia de promoción

Antes de lanzar, identifica tus canales de promoción, como redes sociales, correo electrónico, blogs y medios locales. Crea contenido promocional, como imágenes, publicaciones en redes sociales y comunicados de prensa.

Casi todas las plataformas te solicitarán que establezcan un plazo y una meta y solo te entregarán los fondos si llegas a esa meta en el tiempo que acordaste, de manera que puedas asegurar a tus aportantes que has conseguido suficientes fondos para cumplir con tu compromiso. Se realista y haz bien las cuentas, en caso de que no llegues a la meta en el tiempo estipulado, los intermediarios se encargarán de regresar el dinero a los inversionistas. Por otra parte, si llegas a la meta y recibes lo que solicitaste vas a tener el compromiso de entregar los resultados que prometiste. En este sentido, es recomendable establecer un compromiso mínimo viable y prepararte para escalarlo en caso de que obtengas más recursos de los que tenías planeado.

7. Lanzamiento y duración de la campaña

Decide la duración de tu campaña. La mayoría de las campañas suelen durar entre 30 y 60 días.
Establece hitos y actualizaciones clave que compartirás durante la campaña para mantener a los patrocinadores involucrados.

Publica tu campaña en la plataforma de crowdfunding seleccionada. Comparte el enlace de la campaña a través de tus canales de promoción y anima a amigos, familiares y seguidores a compartirlo también.

Mantén una comunicación activa con tus patrocinadores a lo largo de la campaña. Responde rápidamente a preguntas y comentarios de los patrocinadores para demostrar tu compromiso. Publica actualizaciones periódicas sobre el progreso de tu proyecto y cómo se están utilizando los fondos.

Da conocer los resultados de la campaña y piensa cómo agradecer públicamente a quienes participan e informar sobre los avances. Se transparente en todo momento.

8. Agradece y celebra

Agradece a tus patrocinadores por su apoyo y celebra el éxito de tu campaña, incluso si no alcanzaste el objetivo total. Comunica los próximos pasos y sigue encontacto.

Explora el recurso misiva agradecida: el valor del agradecimiento.